Llevo un día como el tiempo largo oscuro y lluvioso
Muy melancólico y profundo
Ayer me reía a carcajadas mientras el sol brillaba en mi frente y hoy me siento abatida como el día...
Aunque se que después de la tormenta siempre llega la calma
No me puedo aplicar el cuento pues no me sucede nada del otro mundo
Sólo cierta lejanía
Vuelven los Olmos silenciosos
Vuelven los rasgares de óxido de los columpios viejos
Vuelve la infancia vista en los ojos de alguien adulto
Es esa clase de dolor que te hace ni sentir ni padecer
Es esa clase de sentimiento que es casi parsimonioso con toda la sintomatología cercana a una depresión
Ya me siento libre en casa ya me siento libre... y vacía a la vez llena por fuera
Cansada ya del Ojalá me muera como rapeaban por ahí...
Ya no se ni quien ni donde y ni me importa
Como siempre me armo con la lanza de mi sonrisa y sigo para adelante y mirando siempre al tenebroso horizonte
Mientras la Luna desangrada cae en el hundiéndose poco a poco
Como mis manos en las suyas
Como cuando nos secamos las difíciles y alergenas lagrimas
Como cuando ya no sabes que decir y te callas.